En entrevista con el diario El País, dijo que hay que mantenerse alertas.

El presidente de Bolivia, Luis Arce, aseguró, en entrevista con el diario El País, que detrás del levantamiento militar del 26 de junio hay “intereses extranjeros” que quieren los recursos naturales del país. Respecto al discurso de “autogolpe” que maneja Evo Morales, dijo que no le sorprende. Afirmó que el dirigente cocalero está “dispuesto a todo” con tal de ser candidato presidencial.

—¿Por qué en Bolivia ha sido posible un golpe de Estado?

—Hay que hablar en realidad de las circunstancias que no permitieron el golpe de Estado. En Bolivia, objetivamente, no existe un móvil ni económico ni social para ese tipo de situaciones. Está claro que hay intereses extranjeros y nacionales que están buscando, de alguna manera, hacerse del poder en Bolivia. Esos intereses buscan nuestros recursos naturales. Bolivia es la principal reserva mundial de litio, tiene además tierras raras que son lo que hoy necesita el planeta. ¡Cómo no los van a querer!

—¿Usted ve atrás del general Zúñiga la mano negra de estos intereses extranjeros?

—Por supuesto. Ellos han sido los operadores, pero la mañana del día del golpe hubo una reunión en el Estado Mayor. No solamente estuvieron militares, hubo militares jubilados involucrados en el golpe de 2019 y hubo también civiles. Detrás de esos militares jubilados y civiles hay algo más, que es justamente lo que se investiga.

—Cuando uno habla con analistas económicos coinciden en que hay luces amarillas que atender, como la falta de dólares o el déficit fiscal. ¿Coincide con estas lecturas?

—Para nadie es desconocido que Bolivia es exportador de gas, pero el gas no tuvo en el gobierno de Evo Morales la inversión en exploración que necesitaba. Aquí está el problema, hoy no tenemos la cantidad suficiente de gas para ampliar los volúmenes de exportación (...).

 —¿Alcanza el año y medio de mandato que le queda para resolver esto?

—Lo estamos haciendo desde el primer día. Evo hizo solo seis proyectos de exploración; nosotros hemos hecho 43, ahí está la diferencia. No solo eso, porque yo sé lo que meten los analistas económicos de la derecha en la cabeza. Bolivia está entrando en un franco proceso de industrialización no solo de los recursos naturales. Bolivia importaba todo, hasta jabones, y ahora estamos produciéndolos.

—Trajo varias veces a colación a Morales. ¿Le sorprendió que hablase de un autogolpe?

—No me sorprende, porque sabemos lo que quiere Evo.

—¿Y qué quiere Evo?

—Quiere ser candidato a la presidencia en 2024 a como dé lugar. Él lo dijo: ‘Voy a ser candidato a las buenas o a las malas’. Nos tenía con conflictos aquí, con amenazas de bloqueos, está azuzando a los sectores para que salgan a conflictuar el país para que después se junten los cocaleros del Trópico (Cochabamba), en el centro del país, y exijan su candidatura.

—¿Dice entonces que Morales trabaja para que las cosas salgan mal?

—Por supuesto, o tiene alguna duda al respecto.

—¿El golpe militar podría ser una buena excusa para la unificación del MAS, sobre todo pensando en las elecciones del año próximo?

—Hemos visto lo que están haciendo las organizaciones sociales que están sustentando al Gobierno, los fundadores del MAS. Ellos llamaron en su momento al compañero Evo a una reunión, como dice el estatuto, para convocar a un Congreso entre la dirección nacional y los dueños del Instrumento Político en cuatro oportunidades. Nunca fueron escuchados, ni siquiera respondió.

—¿Le sorprendió su reacción?

—No me sorprendió, porque todos los que lo conocemos sabemos lo que quiere. Y va a usar todo, incluso poner en duda el golpe fallido, por sus aspiraciones políticas personales.

—Morales está inhabilitado por la justicia para ser candidato. ¿Hay alguna posibilidad de que eso se revierta?

—En 2019 ese fue el problema. Él se hizo habilitar por el Tribunal Constitucional diciendo que la reelección es un derecho humano. La CIDH (Comisión Interamericana de Derechos Humanos) ha dicho que ése no es un derecho. La situación para nosotros está clara, pero vaya a contárselo usted a él, que está convencido de que es candidato.

—¿Si hubiese una oferta de diálogo estaría dispuesto a reunirse con él?

—Es que no solo soy yo, aquí las organizaciones sociales, que son las dueñas del Instrumento Político. Ellos le dicen a Evo que no se los arrebate. Y estoy de acuerdo con ellos, porque ellos son los fundadores. Cuando se funda el MAS, no estaba Evo.

—¿Qué le espera ahora a Bolivia luego de este golpe fallido?

—Tenemos que estar alertas. Conociendo la historia de América Latina sabemos todo lo que ha ocurrido para debilitar a gobiernos populares, en especial a aquellos que tenemos recursos naturales. Hemos instruido tomar medidas para tomar el control de todas las instituciones, especialmente de la Policía y las Fuerzas Armadas.