Organizaciones sociales y sindicales mantienen el estado de emergencia para defender la democracia, exigen sanciones ejemplificadoras para los responsables y una investigación rigurosa para establecer quiénes están detrás del fallido golpe de Estado.

Anoticiados de estos hechos, en la ciudad de La Paz y en diferentes regiones del país, las organizaciones sociales, de trabajadores y juntas vecinales salieron a las calles para repudiar el atentado al orden constitucional y respaldar al gobierno de Arce. Desde entonces se encuentran en alerta permanente ante cualquier intento de desestabilización social.

Las fuerzas sociales advierten que estarán preparadas ante cualquier intento de desestabilizar el gobierno constitucional de Luis Arce.

“Se debe aplicar las sanciones ejemplarizadoras para que nunca más, a ningún militar, se le ocurra levantar las armas contra el pueblo, la democracia costó sangre a muchos bolivianos y no podemos seguir en pleno siglo 21 con estos atropellos a la democracia”, enfatizó el presidente de la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (Cidob), Justo Molina.

El miércoles pasado, una fracción militar comandada por Juan José Zúñiga tomó la plaza Murillo, centro del poder político de Bolivia, e ingresó de manera violenta con una tanqueta al Palacio Quemado, anexo de la Casa Grande del Pueblo.

El Bloque Oriente, que aglutina a las organizaciones sociales cruceñas, se declaró en vigilia permanente para defender la democracia y pidió la máxima sanción para Zúñiga que ahora se encuentra con detención preventiva de seis meses en el Penal de El Abra, de Cochabamba. Dos de sus colabores en el golpe fallido están en Chonchocoro.

“Vamos a pelear hasta las últimas consecuencias, para que jamás haya otro golpe Estado y le decimos a Zúñiga que empiece a delatar a todos los que están queriendo acabar con la economía y la vida de los bolivianos, quién está detrás de todo esto, no es solo él, esto fue maquiavélicamente trabajado hace tiempo”, dijo la ejecutiva de la Federación de Mujeres Campesinas de Santa Cruz, Felipa Montenegro.

Tras ratificar la lucha permanente por la defensa de la democracia, la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb), exigió una investigación por el fallido golpe de Estado para dar con todos los responsables y la baja inmediata de los militares implicados.

“Siempre estamos velando por defender la democracia y pedimos a la Justicia que se investigue y hasta el último comandante que ha organizado (el golpe) se le debe dar de baja”, dijo el ejecutivo de la Csutcb, Lucio Quispe.

La máxima organización del movimiento campesino del país, advirtió que “no permitirá que se interrumpa el orden constitucional y hará respetar al gobierno legítimamente electo con más del 55% del voto popular”.

En tanto, la Central Obrera Boliviana (COB) instruyó mantener el estado de emergencia en todos los sectores sindicales y sociales afiliados, y estar alertas ante cualquier llamado de su ente matriz.

Además, la organización de los trabajadores convocó a un ampliado nacional en el cual se definirán las estrategias en defensa de la democracia.

En Sucre, la Federación de Trabajadores Campesinos de Chuquisaca, Tomás Katari, repudió enfáticamente el golpe de Estado fallido.

“El pueblo se levantó en defensa de la democracia y el presidente no está solo, las organizaciones sociales vamos a acompañarlo hasta que termine su gestión constitucional”, dijo el dirigente de la organización, Javier Mundocorre.

Instó a las organizaciones sociales y a la población, del campo y la ciudad, a mantener la unidad para defender la democracia que costó vidas a muchos bolivianos.

Zúñiga y otras 21 personas, entre militares del servicio pasivo y activo, y civiles, fueron aprehendidos entre el miércoles y el viernes.

Nj/Afbs