Medio: Los Tiempos
Fecha de la publicación: jueves 16 de agosto de 2018
Categoría: Debate sobre las democracias
Subcategoría: Repostulación presidencial / 21F
Dirección Web: Visitar Sitio Web
Lead
Contenido
El presidente Evo Morales y el vicepresidente Álvaro García Linera fueron los grandes ausentes de la festividad de la Virgen de Urkupiña, que concluye hoy con la visita al Calvario, a pesar de que los últimos siete años siempre estuvo uno de los dos en los actos centrales de la celebración. Opositores y un analista político aseguran que estas ausencias se deben al miedo de las principales autoridades a ser abucheados con el “Bolivia dijo No”.
En la misa central celebrada ayer en puertas de la iglesia de San Idelfonso, en Quillacollo, se notó la ausencia de los principales líderes políticos del país; participaron el gobernador Iván Canelas, el alcalde suplente de Quillacollo Zacarías Jayta y la alcaldesa suplente de Cercado Karen Suárez. También estaban algunos dirigentes de organizaciones sociales como la exejecutiva de la Confederación Nacional de Mujeres Campesinas Bartolina Sisa, Juanita Ancieta.
La liturgia fue precedida por gritos de “Bolivia dijo No” por parte de los asistentes.
La ausencia del presidente Morales se debió a su participación ayer de la posesión del mandatario paraguayo Mario Abdo, mientras que el Vicepresidente lideró la reunión de Gabinete y luego participó de la entrega de una obra en La Paz. Sin embargo, el jefe de Estado tuiteó: “Hoy los bolivianos celebramos, en Cochabamba, la festividad de la Virgen de Urkupiña”.
La última vez que el Presidente faltó a la festividad fue en 2016 por motivos de agenda, pero ese año estaba García Linera. En tanto, el Presidente participó en la festividad el 2011, 2012, 2013, 2014, 2015 y 2017. La mayor parte de las visitas las realizó junto al Vicepresidente.
Para el analista político, Rolando Tellería, la ausencia, después de muchos años, de autoridades del poder Ejecutivo y Legislativo, en la tradicional misa de Urkupiña, pone de manifiesto “el profundo temor del oficialismo, no sólo a escuchar lo que tanto los atormenta, el ‘Bolivia dijo No’, si no fundamentalmente a ser objeto del profundo desprecio y repudio que siente hoy la ciudadanía’.
“Frente a ese generalizado y hostil escenario, todos sus actos oficiales tendrían que programarlos en el trópico de Cochabamba, como la celebración del récord del caudillo en la presidencia, que se realizará en Ivirgarzama”, aseguró.
Sin embargo, la ausencia de Morales y García no fueron las únicas de políticos en la festividad.
Por ejemplo, el gobernador de Santa Cruz, Rubén Costas, y el dirigente de Unidad Nacional (UN), Samuel Doria Medina, que tradicionalmente participan de las actividades de Urkupiña, tampoco aparecieron por lo menos en la entrada y el día de la fiesta. El expresidente Jorge Tuto Quiroga tampoco asistió en esta ocasión.
El alcalde suspendido de Quillacollo, Eduardo Mérida, asistió como “un ciudadano más” a la festividad, mientras que su colega de Cercado, José María Leyes, también se ausentó debido a su detención domiciliaria por el caso Mochilas.
7 años en Urkupiña. Desde 2011 siempre estuvo o el Presidente o el Vicepresidente en la festividad, lo que no sucedió esta gestión.
OPINIONES
"Hoy los bolivianos celebramos, en Cochabamba, la festividad de Urkupiña, a la que asisten miles de personas de todos los departamentos y el exterior". Evo Morales. Presidente del Estado
"¡Que la Mamita de Urkupiña los bendiga y guíe en el camino de recuperación de la democracia!". Rubén Costas. Gobernador de Santa Cruz
IGLESIA PIDE DEJAR PELEAS POLÍTICAS
El arzobispo de Cochabamba, Óscar Aparicio, dijo en la misa central de Urkupiña que la unidad debe ser el soporte para construir una sociedad en el marco de los valores humanos y cristianos.
“Sobre todo hay que trabajar por quienes más nos necesitan, sobre todo los pobres. Debemos ser una sola familia”, manifestó.