El presidente Evo Morales aseguró ayer que la oposición que rechaza su reelección en los comicios de 2019, buscará generar una "convulsión social" en el país para forzar su salida del poder, ante su imposibilidad de realizar un golpe de Estado o un golpe congresal.

"No creo que haya golpe militar, pero intentarán una convulsión nacional. No van a poder dar un golpe congresal, porque tenemos dos tercios en la Cámara de Senadores y también en la de Diputados. Aquí no puede pasar un golpe judicial. Entonces, la embajada (de Estados Unidos) busca cómo convulsionar el país. Pero han fracasado, fracasado y fracasado, porque estamos con la verdad. Es la gran ventaja que tenemos", explicó Morales al diario "La Jornada" de México.

Enfatizó que su futuro está en manos del pueblo y defendió la vía que lo habilita para ser nuevamente candidato en 2019, el polémico fallo del Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) que decretó la postulación indefinida en contra de la Constitución y el resultado del referéndum del 21 de febrero de 2016 (21F).

"¿Qué fue el referendo? Fue una consulta para modificar la Constitución. El referendo dijo No, y no se va a modificar la Constitución, aunque la oposición hizo su campaña con base en la mentira. La derecha usó mujeres, inventó niños. ¡Hubo tanta mentira! Pero también hay una interpretación constitucional que permite la repostulación y una sentencia que la avala. Y es el pueblo el que pide continuar con esta revolución democrático-cultural", señaló.

Y agregó que "los movimientos sociales se plantean continuar con nuestra revolución. Y para eso quieren que Evo siga al frente. Quieren que termine las grandes obras. Nunca había soñado ser Presidente, y como tal, hacer estos cambios junto al pueblo boliviano".

Señaló que ante la situación decadente de algunos de los gobiernos de izquierda en la región, él se encomienda al pueblo y resaltó que la Central Obrera Boliviana (COB) haya decidido apoyar su repostulación.

"Yo estoy en manos del pueblo. Por primera vez, la gloriosa Central Obrera Boliviana, en su congreso ordinario, decide que Evo sea su candidato a la Presidencia. Es un hecho histórico. Nunca ha habido eso en toda la historia boliviana. Pero además tenemos el pacto de unidad campesino-indio boliviano. Me acaban de informar que ha habido un acto proclamando la ratificación de Evo como Presidente", sostuvo.

RECHAZO Y CRÍTICAS

La candidatura de Morales en busca de otra reelección en 2019 es criticada y rechazada por opositores políticos, plataformas ciudadanas, sectores empresariales y la Iglesia Católica, algunos de los cuales presentaron recursos legales ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

El ex presidente Tuto Quiroga afirmó que la Organización de Estados Americanos (OEA) a través de sus entidades dictaminará en los próximos meses que "la reelección indefinida no es un derecho humano", vale decir, en la misma línea que se pronunció la Comisión Europea para la Democracia por el Derecho, conocida como Comisión de Venecia.

"En estos meses, te aseguro, que el Sistema Interamericano de la OEA, la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) que tiene Sede en Washington (EEUU) y la Corte de San José (Costa Rica), se va a pronunciar, va emitir una opinión y un dictamen diciendo, lo que ha dicho la Comisión de Venecia, que la reelección no es un derecho humano, que ser tirano no es un derecho humano", afirmó en entrevista con el programa "Hagamos Democracia" de la Red Erbol, el domingo.

Morales manifestó que esas y otras tantas críticas –además de medidas de presión cada vez más recurrentes dentro y fuera del país–, son intentos de la derecha del país por "volver al pasado" y "echar atrás las conquistas sociales".

El Primer Mandatario, que accedió a una entrevista en Cochabamba con el citado medio admitió que la "gran debilidad" del MAS por ahora es la clase media.

"A veces pienso en si hay que hacer una clase media con dignidad, (antes que) tener una clase a medias", y siente que "también hay, no sé si es 10 por ciento, quien no entiende que un campesino, un dirigente sindical, un indio, sea Presidente. Ellos (la derecha) dicen: ‘nosotros hemos estudiado para dominar a los indios, para mandar a los indios’. Ese es el complejo que tienen".