El magistrado del Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) Carlos Alberto Calderón, de Santa Cruz, dejó la magistratura este 2 de enero al presentar su “renuncia irrevocable” ante la Sala Plena. Extraoficialmente se conoce que su colega Elizabeth Cornejo, de Tarija, también habría tomado el mismo camino.

En una carta fechada este martes 2 de enero, Calderón indica que cumplió los seis años de mandato señalados en la Constitución y que, en su criterio, la Declaración Constitucional 044/2023 (en realidad, se refiere a la 049/2023) fue “malentendida, tergiversada y respondida de manera reactiva por diversos actores de la sociedad boliviana”.

“Situación que genera incertidumbre, principalmente en el foro litigante, además de absoluta incomodidad y malestar como autoridad miembros del TCP de Bolivia, la misma que hace inviable la continuidad del suscrito en el cargo, razón que decanta en la renuncia irrevocable al cargo de magistrado del Tribunal Constitucional Plurinacional de Bolivia”, agrega el magistrado renunciante.

Más temprano el diputado Marcelo Pedrazas (CC) había publicado en redes sociales que Calderón había renunciado. Según el parlamentario opositor, sus denuncias “van dando resultados, sigamos en la lucha”.

De manera extraoficial, se conoce también que la magistrada Cornejo habría retirado sus pertenencias del alto tribunal con sede en Sucre.

De confirmarse esta segunda renuncia, el TCP se quedaría con siete magistrados.

El nuevo año constitucional empezó con la ampliación del mandato de las autoridades judiciales dispuesta por el TCP mientras se elija a sus reemplazantes en elecciones democráticas