El alcalde de La Paz, Iván Arias, cumplió ayer de manera normal su agenda a la espera de la notificación de la justicia, ordenó su detención domiciliaria sin derecho al trabajo por una denuncia de acoso y violencia política.
“Todavía no hemos sido notificados y apelamos a esa sentencia. Esperemos que, en el transcurso de las siguientes horas, nos den una enmienda, porque no puede ser que nos den una detención domiciliaria. El Alcalde tiene que trabajar”, afirmó Arias en una inspección a una de sus obras.
Entretanto, el líder de CC, Carlos Mesa, expresó su “solidaridad” con el burgomaestre paceño. “Su detención es ilegal, inconstitucional y violenta los intereses de los paceños”, agregó.
Algo parecido expresó el exjefe de UN, Samuel Doria Medina: “No cabe duda de que el objetivo de la maniobra contra Iván Arias es violar el mandato del voto popular con la cuña de la justicia”, señaló.