La elección del presidente o presidenta del Senado es de vital importancia para el futuro del presidente de Bolivia, Luis Arce, puesto que ese cargo después del Vicepresidente, es el tercero en la línea de sucesión presidencial, por lo que el más alto nivel del Estado y la dirección política del MAS negocian quién estará a la cabeza de la Cámara de Senadores, según el análisis del politólogo Carlos Cordero.
“Están interviniendo en este proceso de negociación desde el Presidente del Estado (Luis Arce) hasta los líderes políticos como Evo Morales. Se está decidiendo la presidencia de la Cámara de Senadores en el más alto nivel de negociación y todo esto porque la Cámara de Senadores pone al tercer hombre (o mujer) en la línea de sucesión presidencial”, dijo Cordero a El Deber.
A dos semanas de que comience la cuarta gestión Legislativa se intensifican las reuniones y deliberaciones en el Legislativo, en especial en los dos bandos del oficialismo: “arcistas” y “evistas” para definir quién va a presidir la Cámara Alta. Mientras el bloque de Morales ratificó a Andrónico Rodríguez para que presida el Senado por cuarta vez.
El hecho destapó e hizo pública la disputa entre los dos bloques en el Senado, lo cual, para el experto Cordero, también es reflejo de la crisis del MAS y su inminente división.
Es por eso que en la decisión de quién estará a cargo de la presidencia del Senado también participa el jefe de Estado y, por su lado, el expresidente Evo Morales, mueve sus fichas a través de su bancada.
A Arce le interesa que el presidente de la Cámara Alta sea una persona “leal” a su gobierno, que sea confiable y que garantice la continuidad del proceso de cambio, afirmó Cordero.
