Un anterior encuentro del MAS, en el que estuvo Evo Morales. Foto: RRSS del MAS.

Brújula Digital |21|09|23|

Pablo Peralta M.

La pugna que se registra al interior del Movimiento Al Socialismo (MAS) excedió los límites partidarios y tiene impacto en tres áreas clave: ámbito organizativo de los sectores sociales, en la esfera legislativa y en el ámbito electoral.

Ese es el escenario que precede al congreso del MAS, que se prevé se realizará en Lauca Ñ (Cochabamba), en octubre, y frente al cual sectores arcistas pidieron cambiar de sede y resolver la reducción de la cantidad de delegados.

En el ala renovadora del MAS consideran que las disputas se expanden a otros ámbitos a causa de la “angurria de poder” de “algunos dirigentes”. En tanto, en el bando evista reconocen que hubo un “alejamiento” y ven difícil que haya una reconciliación con el ala arcista.

De los sectores sociales

En el ámbito organizativo, el impacto de la contienda interna del MAS se refleja en la fractura que hay en las organizaciones matrices de ese “instrumento político”. En el estatuto del MAS, en el artículo 10, figuran como organizaciones “fundadoras” la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB), la Confederación Sindical de Comunidades Interculturales de Bolivia y la Confederación Nacional de Mujeres Campesinas Indígenas Originarias de Bolivia Bartolina Sisa.

No obstante, en la Csutcb y en los Interculturales hay dos dirigencias, una que respalda al Gobierno y otra que está alineada al expresidente Evo Morales. En el caso de las Bartolinas se han registrado fuertes pugnas, con acusaciones de separatismo y deslealtad.

Del ámbito legislativo

En la esfera legislativa, el impacto de la pugna interna del MAS se ve reflejado en que en la Asamblea Legislativa Plurinacional hay una bancada de legisladores de ese partido alineada al Gobierno y otra afín al expresidente Morales. La más reciente escaramuza entre ambos bandos ocurrió en la sesión ordinaria 167 de la cámara de Diputados, del jueves, en la que hubo tal cantidad de mociones previas que el tiempo que se dedicó a las mismas fue de al menos cinco horas y el grueso de las intervenciones se enfocaron al tema de la ley transitoria de elecciones judiciales, para renovar las cúpulas del Órgano Judicial y del Tribunal Constitucional.  

“A David Choquehuanca, Lucho Arce no les interesa cambiar a los magistrados como establece la Constitución”, expresó en la sesión el diputado Héctor Arce, del ala evista. “¿Qué miedo hay de un poco más esperar y trabajemos bien para el pueblo boliviano?”, sostuvo la diputada Gloria Callisaya, de la facción arcista.  

De la esfera electoral

En el ámbito electoral, esta semana se conoció la solicitud elevada por el vocal Tahuichi Tahuichi Quispe a la Sala Plena del Tribunal Supremo Electoral. En ella, la autoridad electoral pidió excusarse de formar parte del trámite relacionado con la supervisión al congreso del MAS de Lauca Ñ, que organiza la Dirección Nacional de ese partido.

“Algunos miembros de esta organización política publicitan o dan información falsa, tratando de menoscabar la imagen, la honestidad, la imparcialidad, árbitro imparcial y el alto tecnicismo que ejerce mi vocalía. Empero, han mencionado mi nombre y apellido como si estuviera parcializado con cualesquiera de las partes, y al extremo que solicitan o afirman que debería excusarme”, indicó Tahuichi Quispe en su memorial. (La Sala Plena rechazó la excusa y el vocal evalúa impugnar)

¿Habrá reconciliación?

En contacto con Brújula Digital, la diputada María Alanoca, gremialista y militante del MAS desde 2002, manifestó que es difícil una reconciliación con el ala arcista y explicó que hubo un ampliado, el 22 de junio, en Cochabamba, donde pudo haberse arribado a ese escenario, pero –sostuvo- no asistieron los dirigentes arcistas, enviaron a “su segunda cabeza, sus codirigentes”.

“No, con esas personas oportunistas difícilmente. Nosotros limpiamente, como en el MAS, queremos manejar. Hemos luchado para que la Bolivia sea bien digna. Queremos dejar una herencia sin corrupción. Este Gobierno, nuestro hermano, se ha hecho llevar nomás con esos esos malos dirigentes”, lamentó la legisladora que representa a El Alto.  

En tanto, el diputado Hernán Hinojosa, del ala renovadora, declaró a este medio que no sabe si habrá o no reconciliación, puesto que “es la parte orgánica que tiene que trabajar”. Considera que la disputa del MAS se expande a otras esferas debido a la “angurria de poder”.  

“Hay algunos dirigentes que, de manera desesperada, quieren, de alguna u otra manera, tomar el poder y están desesperados de angurria de poder”, expresó el legislador, antes de señalar que verán si el congreso marca la unidad y si tendrá alta participación.

La silla, la cuestión

El constitucionalista Israel Quino, en contacto con este medio de comunicación, sostuvo que no solamente la disputa impacta en esos tres ámbitos, sino que incluso se busca instrumentalizar a la justicia. Ese paso, según el analista, puede llevar a un “quebrantamiento democrático en el país”.

“Yo creo que no solamente se queda en lo social o en lo legislativo o en lo electoral. También se ha encontrado la forma de instrumentalización desde la justicia para consolidar un golpe de Estado judicial silencioso, pero que nos está llevando peligrosamente a un Estado inconstitucional de derecho. Esto es muy grave ya, porque se va a poner en riesgo el principio de separación y división de poderes y puede existir un quebrantamiento democrático en el país”, expresó.  

Quino considera que el meollo de la disputa del MAS está relacionado con el poder y la silla presidencial. “Yo creo que la toma del poder por el poder y desde el poder es el fin último que se persigue en este momento desde las propias esferas que detentan el poder político en el país. Algo tiene esa silla presidencial, el que se sienta no se quiere mover. Le pasó al señor Evo Morales, le ha pasado a la senadora Jeanine Añez y creo que le está pasando a este momento del poder político”, manifestó.

BD/PP