Brújula Digital |16|09|23|

El dirigente cocalero Arnold Alanes amenazó con convulsionar el país en caso de que el expresidente Evo Morales sea inhabilitado como candidato para las elecciones de 2025 por el Tribunal Constitucional Plurinacional. 

“De querer intentar boicotear o de querer intentar inhabilitar al hermano expresidente, Bolivia se va a levantar, y queremos decirles, están jugando con fuego, cuidado después no haya bombero quien los apague, el pueblo se va a levantar” dijo Alanes, dirigente cocalero de La Paz y perteneciente a la facción evista, a los medios de comunicación.

Lo que encendió las alarmas del sector evista del MAS fue la declaración del presidente del TCP, Paul Franco, quien dijo esta semana que ese organismo tomará en cuenta una opinión consultiva de la CIDH en sentido de que la reelección presidencial no es un derecho humano; así, es posible que se redacte una eventual sentencia que le quite a Morales el derecho de participar en las elecciones. 

“Entonces, el día en que nosotros tengamos que resolver un caso concreto donde se tenga que analizar cualquier opinión consultiva, analizar la aplicación preferente de la Convención Interamericana de Derechos Humanos, del Pacto Internacional de Derechos Civiles, Políticos, Económicos, Culturales y todo aquello que emerge del Corpus Iuris de derechos, así lo vamos a hacer”, sostuvo Franco.

Alanes recordó que el artículo 168 de la Constitución Política del Estado señala que, pasado un período, un presidente puede volver a postular, y eso ya ha ocurrido, con los gobiernos de Jeanine Añez y el actual. Sectores opositores y arcistas señalan que la Constitución y la opinión consultiva de la CIDH impiden un nuevo mandato de Morales y que por ello el TCP debe emitir una sentencia.

El dirigente cocalero de La Paz llamó a las organizaciones sociales y dijo que se declara en estado de emergencia porque según él no hay vía jurídica constitucional que inhabilite a Morales como candidato. 

En caso de ser inhabilitado, cambiaría completamente el escenario político boliviano, ya que el oficialismo tendría un solo candidato fuerte, el presidente Luis Arce, lo que también afectaría a la oposición. Dos candidatos de la línea masista (Morales y Arce), ofrecen una oportunidad para la oposición ya que dividiría el voto de ese sector. Un solo candidato, por el contrario, podría unir a esas facciones.

BD/AGT