Tras la reunión de diferentes organizaciones sociales afines a Evo Morales, el Pacto de Unidad paralelo suspendió este sábado el bloqueo de caminos convocado para este lunes 4 de septiembre. La medida de presión fue postergada hasta el 16 de octubre.

“A fin de evitar la distorsión de los verdaderos objetivos que se persiguen, a pedido de quienes integran el Pacto de Unidad (interculturales, bartolinas y otros sectores sociales), considerando la magra economía por la que atraviesan los bolivianos, se otorga un cuarto intermedio hasta el 16 de octubre”, es parte de la resolución que fue emitida por el Pacto de Unidad afín a Morales.

Agregó que en caso de que el Gobierno no atienda el pliego petitorio de los sectores se iniciará dicho bloqueo nacional, por lo que se mantienen el estado de emergencia a nivel nacional.

Humberto Claros, uno de los principales dirigentes de este bloque, indicó que, a diferencia del Gobierno, ellos sí “han escuchado” a las bases, al pueblo y a los sectores productivos en mérito a la magra y deficiente situación económica del país.

“Vamos a escuchar al pueblo y los sectores que nos han solicitado (no paralizar) pero que no se atreva el Gobierno a hacer ningún acto que violente la tranquilidad orgánica y social porque cuidado y se precipite el bloqueo. Si bien es un cuarto intermedio hasta el 16 de octubre, (este) puede precipitarse si el Gobierno sigue imprimiendo estas medidas dictatoriales”, amenazó el dirigente.

Bloqueo contundente

Ponciano Santos, dirigente de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB), del ala evista, dijo que el 16 octubre será un bloqueo contundente con todos los sectores sociales para que el Gobierno deje de entrometerse en los movimientos sociales.   

“El pueblo y los sectores sociales se están levantando. Cuando anunciamos un bloqueo para el 4 de septiembre, (recién) bajan a las bases y van a los rincones del país. Así deberían trabajar durante un mes y medio para solucionar las problemáticas estructurales del país”, señaló Santos.

La resolución también dispone de formular un único pliego petitorio, documento que debe ser presentado al presidente Luis Arce hasta el 29 de septiembre, “otorgándoles 15 días para que otorgue soluciones reales y concretas a cada una de las demandas”.

También, exigen a las instancias de defensa de la sociedad, defensor del Pueblo y Ministerio Público iniciar investigaciones de los ilegales actos policiales de intervención en el congreso de la CSUTCB y se sancione a sus autores materiales e interculturales.

El miércoles, dirigentes de organizaciones sociales afines a Morales anunciaron la conformación de un nuevo Pacto de Unidad cuyo objetivo es “salvar a Bolivia”. Se trata de un Pacto de Unidad paralelo al que conforman otros dirigentes que no respaldan al Gobierno y la gestión de Luis Arce.

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Pacto de Unidad

En este Pacto de Unidad para aparecieron dirigentes que son reconocidos por Morales, pero no así por el Gobierno ni la Central Obrera Bolivianos. Entre ellos están Ponciano Santos de la CSUTCB y Juan Enrique Mamani de la Confederación Sindical de Comunidades Interculturales Originarios de Bolivia (CSCIB), ambos que conformaron su organización paralela.

El conflicto campesino se agravó tras la violencia desatada en el congreso de los campesinos, la CSUTCB se dividió en dos cabezas. El presídium de la organización posesionó a Lucio Quispe como máximo dirigente, y los disidentes proclamaron a Santos.

El viernes, el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) advirtió con millonarias pérdidas para las exportaciones e importaciones por el bloqueo de carreteras. Gary Rodríguez, gerente general de la entidad, señaló que sólo a nivel de comercio exterior el país perderá $us 65 millones por día.