Medio: El Deber
Fecha de la publicación: martes 29 de agosto de 2023
Categoría: Órganos del poder público
Subcategoría: Asamblea Legislativa Plurinacional
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El MAS, CC y Creemos ven una gestión nula de la segunda autoridad del país, lo hacen responsable del fracaso de las elecciones judiciales. Además, reprochan su silencio en otros problemas legislativos
Las elecciones judiciales están en “un punto muerto” en el Legislativo, admitieron los parlamentarios porque a seis días de cumplirse el plazo del Tribunal Supremo Electoral (TSE) no hay ley de preselección de candidatos. Ven como principal responsable al presidente de la Asamblea Legislativa, David Choquehuanca, y afirman que destacó por su ausencia y su falta de liderazgo para solucionar el tema.
El diputado Alberto Astorga de Comunidad Ciudadana (CC) apuntó toda su artillería contra Choquehuanca, a quien hizo responsable del fracaso de la selección de candidatos que es la primera fase de las elecciones judiciales, que debían realizarse en diciembre de este año.
“El presidente nato de la Asamblea Legislativa, David Choquehuanca está totalmente ausente, no participa en nada, no viabiliza, no busca consensos ni acercamientos con las bancadas de oposición. Tiene una ausencia total. Me animo a decir que es uno de los peores vicepresidentes de la historia de Bolivia”, afirmó Astorga a EL DEBER.
Para el diputado opositor, la ausencia de Choquehuanca del Legislativo “es total” y en varios temas, no solo en las elecciones judiciales ya que no emitió ningún pronunciamiento por otros casos como son las acusaciones de acoso sexual contra el diputado de su partido, Juan José Jáuregui o la decisión de la justicia de suspender las interpelaciones a ocho ministros de Luis Arce.
Tres semanas
La última vez que se vio a Choquehuanca ocuparse de un tema legislativo fue el 8 de agosto, hace tres semanas, cuando participó de una reunión con los presidentes de ambas cámaras – Diputados y Senado - los jefes de las tres bancadas políticas y los presidentes de las comisiones mixtas de Constitución y de Justicia.
En ese encuentro, se decidió conformar una comisión técnica para consensuar una ley corta para convocar a las elecciones judiciales, no obstante, el hecho solo quedó en la intención y en los discursos porque dicha comisión no culminó ni siquiera una primera reunión ya que el oficialismo y oposición se enfrascaron en atacarse mutuamente haciéndose responsables del fracaso de esa iniciativa. Tras ese intento, no hubo ninguna convocatoria de Choquehuanca.
Sin gestión
El diputado Héctor Arce Rodríguez de la línea “evista”, del Movimiento Al Socialismo (MAS) señaló que el vicepresidente Choquehuanca hasta la fecha no ha cumplido su función como presidente de un Órgano del Estado y una clara muestra es el fracaso de las elecciones judiciales.
“David Choquehuanca ha descuidado completamente su función por la cual el pueblo boliviano lo eligió. David Choquehuanca no hace absolutamente nada por eso ratifico lo que dije hace meses: no creo que haya una elección judicial y hoy estamos seguros. En diciembre no hay elección para el Órgano Judicial”, aseguró Arce.
Para el legislador, con estas acciones manifiestas, el Órgano Ejecutivo está “esperando a que el proceso de las elecciones judiciales, fracase” y está en una cuenta regresiva para anunciar el 4 de septiembre que se tomará la atribución de ampliar el mandato de los actuales magistrados mediante un decreto presidencial.
No obstante, días atrás el ministro de Justicia Iván Lima aseguró a EL DEBER que el “presidente Luis Arce no emitirá ningún decreto supremo para prorrogar el mandato” de las actuales autoridades del Órgano Judicial, destacó que Choquehuanca haya convocado a las tres fuerzas políticas al diálogo, aunque la misma no haya tenido éxito.
Para el senador de Creemos, Henry Montero, el fracaso de la Comisión Técnica que debía concertar una norma para las judiciales está a la vista y Choquehuanca inmediatamente debió convocar a otro acercamiento para evaluar el tema y buscar otras salidas alternativas, lo cual no pasó.
“Es una gestión nefasta del señor Choquehuanca. Él nos metió a un juego con la formación de una comisión la que después abandonó porque no le interesa que esto avance, ni que se pueda seleccionar candidatos para el Órgano Judicial”, dijo Montero a EL DEBER.
El legislador cruceño agregó que no sólo se trata del fracaso de las judiciales sino de otros temas legislativos como por ejemplo, la elección del Contralor que aún está pendiente y que Choquehuanca tampoco convoca para trabajar en el tema.
Propuestas
El diputado Renán Cabezas de la línea “evista”, dijo que ante el fracaso de la elección judicial, él plantea su anteproyecto de ley el mismo que se aplicaría en caso de que todo intento fracase.
“El proyecto de ley busca que la Asamblea Legislativa designe interinos entre los precandidatos a magistrados que ya se han presentado”, dijo el legislador. Recordó que esa elección sería de forma interina en tanto el Legislativo y el TSE organicen las elecciones judiciales.
En tanto, el grupo de juristas independientes, ayer, nuevamente salió ante los medios para plantear a la Asamblea Legislativa y a la sociedad boliviana volver a considerar la propuesta de trabajar en un “acuerdo nacional” mediante un referéndum constitucional para una reforma judicial. Para tal efecto, mandaron una carta a Choquehuanca.
“Planteamos que los principales actores políticos nacionales, a través de la Asamblea Legislativa Plurinacional, retomen la tarea de la reforma judicial y formulen ese Acuerdo Nacional, que, por un lado, evite peligrosos vacíos institucionales y, por el otro, eluda la repetición partidocrática de las elecciones judiciales anteriores”, dice parte de la misiva.
El abogado Juan Del Granado dijo que con esta propuesta es posible que hasta fin de año se pueda tener un Órgano Judicial independiente, creado en base a los méritos de juristas sin afinidades partidarias. “No queremos que se tome al pie de la letra, pero es una base para que se elimine la participación partidaria en la selección de postulantes; se viabilice una selección y elección con base a méritos e independencia; que genere un presupuesto judicial mínimo para el servicio de justicia; y que se revalorice la justicia indígena y la justicia de paz”.