POSICIÓN. Los dirigentes campesinos de la línea “evista” en conferencia de prensa. GENTILEZA
Luego de cumplirse el plazo de 72 horas dado al Gobierno para la entrega de su sede y luego de que esta fuera entregada a la facción “arcista”, la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb) afín a Evo Morales, anunció un bloqueo indefinido de carreteras a nivel nacional desde el 4 de septiembre.
“Hemos dado 72 horas para que nos entreguen la sede de la confederación. Como no se ha cumplido y no han retirado a la Policía que estaba resguardando, por lo tanto, hemos definido que el 4 de septiembre se realice un bloqueo nacional de caminos de forma indefinida”, afirmó el ejecutivo de esa organización, Ponciano Santos.
El segundo secretario de la Csutcb, Humberto Claros, dijo que las diferentes federaciones, regionales y centrales deben organizar el bloqueo de carreteras.
El bloque afín a Morales exige al Gobierno de Luis Arce pedir perdón a los campesinos por la gasificación ocurrida en el congreso del pasado fin de semana, que dejó un saldo de más de 500 heridos.
El dirigente exigió además a la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (Apdhb) y al Defensor del Pueblo investigar esos hechos, caso contrario deberán renunciar a sus cargos porque, a su criterio, estarían encubriendo al Gobierno.
MÁS EXIGENCIAS
Otra de las exigencias de los campesinos es que el Ejecutivo entregue un informe detallado de la deuda externa con organismos internacionales y en especial aquellos contraídos en el mandato de Arce.
A la vez, exigen la destitución del ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo porque supuestamente instruyó la gasificación de los campesinos en el congreso, además del titular de Justicia, Iván Lima por anunciar un proceso contra Morales.
Tambièn exigen la renovación del Comité Ejecutivo de la Central Obrera Boliviana (COB) por considerarlo “golpista”.
Finalmente, demandan la apertura del mercado paralelo de coca de Arnold Alanez, a quien considera el legítimo representante del sector.
DIVISIÓN
El congreso de la Csutcb realizado el fin de semana en El Alto, terminó con conflictos y una marcada división del sector campesino, con dos ejecutivos paralelos: Ponciano Santos (evista) y Lucio Quispe (arcista).
Ayer, la Csutcb saliente entregó las llaves de la sede sindical a Lucio Quispe, desatando la molestia del otro bando.
