Luego de su censura en la Asamblea Legislativa y destitución, Eduardo del Castillo volvió a ser posesionado como ministro de Gobierno por el presidente Luis Arce, la noche de este jueves, en un acto en la Casa Grande del Pueblo, en La Paz.

Como en noviembre de 2020, Del Castillo levantó el puño izquierdo y juró otra vez; luego, tomó la palabra y, en un efusivo discurso, se estrelló contra los legisladores del ala radical del Movimiento Al Socialismo (MAS) y el expresidente Evo Morales.

“Renuncio una vez más a imposiciones personales, a los intereses mezquinos, a los anhelos unilaterales como los tienen algunos en la Asamblea Legislativa Plurinacional y en otras partes del país”, comenzó el Ministro en la parte inicial de su intervención.

Agradeció la confianza del presidente Arce, el “respaldo que le está dando a la juventud boliviana” y a las organizaciones sociales que le expresaron su apoyo.

“Lo que sucedió estos días fue una apuñalada por la espalda a la revolución por parte de algunos asambleístas, quienes en complicidad con bancadas de derecha se unieron para atacar a la gestión de Luis Arce”, señaló.

Acusó a los asambleístas del MAS que aprobaron su censura de “traicionar para apoyar a sus verdugos y olvidar sus raíces y lo que el pueblo boliviano vivió en la gestión 2019”.

Apuntando contra el ala “evista”, recordó que al gobierno de Arce le acusaron de “armar megacoliaciones con la derecha”, pero, en su criterio, eso es lo que hicieron a la hora de aprobar su censura y buscar una “ruptura constitucional”.

Contra Evo Morales

“Presidente, dijeron que teníamos un 'Plan Negro' y se demostró que ellos tienen un Plan Negro contra el Gobierno electo”, cuestionó Del Castillo, en alusión a la denuncia de Morales sobre un presunto plan para desprestigiarlo.  

Así, comenzó a dirigirse al jefe nacional del MAS, señalando que “la revolución es más grande que una persona y sus apetitos electorales, la revolución está por encima de los individuos porque se debe al pueblo y no podemos destruirla para satisfacer a intereses mezquinos de quienes”.

“Dicen ser revolucionarios, dicen luchar contra el imperialismo, pero son solo discursos porque, en la práctica, votan junto con la derecha para destruir un gobierno popular”, apuntó.

“Aquel señor que vimos ingresar al palacio, el año 2005, ganando con más del 50% de votos y una mochila llena de esperanzas, hoy, lamentablemente es un hombre totalmente cambiado. Duele mucho, duele mucho para quienes salimos a las calles afuera de este edificio; muchos no querían defenderlo y la juventud estuvo presente”, dijo, en tono de reclamo, sobre Morales

“Duele que día a día digan que no somos militantes del MAS, cuando tenemos un carnet hace bastantes años (lo mostró), pese a que nos eliminaron del sistema. No entramos a militar por una persona, sino porque creemos en nuestra revolución”, sostuvo.

“No podemos cometer los errores del pasado”

Del Castillo rememoró la crisis política de 2019 al indicar que “no podemos cometer los errores del pasado que provocaron un golpe de Estado”.

“El pueblo ya no quiere más inestabilidad”, agregó.

Según el Ministro de Gobierno, la división entre asambleístas del MAS “no llega al pueblo (...) El pueblo está con su gobierno, no va a permitir intereses mezquinos”.

“Hoy, le guste a quien le guste, el conductor de la revolución es el presidente Luis Arce Catacora y él está cumpliendo”, exclamó Del Castillo, entre vítores de los asistentes, al elogiar la gestión gubernamental.