Dijo que las organizaciones sociales afines al MAS darán una respuesta política participando masivamente del desfile cívico que se realizará en la ciudad de Potosí y dando una batalla ideológica a los sectores de la oposición que anunciaron mensajes paralelos y embanderamiento de casas con lo slogan “Bolivia dijo no” y otro alusivos del 21F.

Ramos sostuvo que el presidente del cívico Marco Antonio Pumari no tiene la representación genuina del pueblo potosino, y no tiene el apoyo de la Central Obrera Departamental, mineros juntas vecinales y transportistas, y se ha reducido a ser un representante de la Samuel Doria Medina, de coincidir con las ideas de Carlos Sánchez Berzaín, Gonzalo Sánchez Lozada y Carlos Mesa.

“Un acto paralelo, un discurso paralelo no es más que un desacato civil, actos de sedición, actos de traición a patria. A quién se le ocurría ejercitar en un aniversario patrio, por su puesto pues a las hordas fascistas. Sin embargo la gran mayoría de los potosinos que tienen sentimiento de pueblo, participarán de los 193 años de grito libertario”, declaró.

El diputado considera que el MAS se encuentra ante una provocación política y un desafío de guerra declarada de la derecha camuflada en colectivos y plataformas ciudadanas, financiada por fundaciones y por supuesto que habrá una respuesta política.

“Los vamos a desenmascarar a quienes aparecer hoy como plataformas y les vamos a mostrar que cuando ellos eran gobierno robaban y traficaban con los recursos naturales del país, por tanto, no hay afán de ir a una confrontación ni provocación”, manifestó el diputado.

Lucha diaria
La senadora opositora Jeanine Añez afirmó que las acciones en Potosí es la lucha diaria por la vigencia de la democracia y de tener un país libre y democrático.

Todas las manifestaciones públicas en una fecha especial, son señal de disconformidad con la gestión de gobierno y un esfuerzo de hacer entender al presidente Evo Morales, que ya no le corresponde ser candidato porque está inhabilitado a ser candidato.