Medio: El Potosí
Fecha de la publicación: viernes 21 de abril de 2023
Categoría: Autonomías
Subcategoría: Regional
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Comcipo ve una actitud egoísta respecto a los beneficios que generará el “oro blanco”.
Los 11 municipios del sudoeste potosino impulsan la “autonomía regional” para proyectar su desarrollo y definir el uso adecuado de los beneficios con que cuentan.
La ejecutiva de la Federación Regional Única de Trabajadores Campesinos del Altiplano Sud (Frutcas), Yameli Cruz, dijo que es un proceso que se impulsa desde hace mucho tiempo y esperan consolidarlo en breve.
Informó que alcaldes de municipios que son parte de la mancomunidad son los que están impulsando gestiones para acceder a la autonomía regional en el menor tiempo posible.
La mancomunidad Gran Tierra de los Lipez está constituida por: la provincia Daniel Campos con sus municipios, Llica y Tahua; provincia Enrique Baldiviezo con el municipio de San Agustín; provincia Nor Lípez con los municipios de Colcha K y San Pedro de Quemes; provincia Sud Lípez con los municipios de San Pablo de Lípez, Mojinete y San Antonio de Esmoruco; y la provincia Antonio Quijarro con los municipios de Uyuni, Porco y Tomave.
Yameli Carlo remarca que se trata de un proyecto regional que busca mejorar las condiciones de vida de ciudadanos de 11 municipios, a través de proyectos y programas de desarrollo.
No se refiere a los beneficios que podrían tener de la industrialización del litio aunque apuestan por una ley que está en el Senado que define una regalía del 10 al 20 por ciento en función al precio internacional.
CUESTIONAN
Los dirigentes del Comité Cívico Potosinista (Comcipo) consideran que el intento de consolidar una autonomía regional en el sudoeste es una acción que busca centrar los beneficios en cinco provincias y dejar de lado a 11.
La presidenta de Comcipo, Roxana Graz, denunció que los pobladores del sudoeste potosino se están reuniendo con el Ministerio de Autonomías para lograr su autonomía regional.
La entrevistada dice que de esta manera, una vez consolidado el proceso, serán las cinco provincias las que tengan la hegemonía en relación al litio y las políticas de Estado se decidirían solo con esas regiones.