1.000 uniformados de la Policía Boliviana garantizarán la seguridad  durante los actos cívicos del 6 de agosto, que tendrán lugar este año en Potosí. No se contempla ningún despliegue fuera de lo común y se limitarán a mantener el orden público.

Representantes de diferentes instancias piden que no exista violencia entre simpatizantes del 'Bolivia dijo No' y los adeptos del Gobierno. Colectivos viajarán a la Villa Imperial para exigir respeto a los resultados del 21F.

El director de planificación del Comando Departamental de la Policía de esa región del país, Luis Fernando Montoya, explicó este lunes que parte del contingente será trasladado de Tarija y Chuquisaca.

Hace días, el comandante general de la Policía, Faustino Mendoza, dijo que "prevemos que va a haber mucha presencia de ciudadanos, por eso, emplearemos, independientemente del servicio de 500 hombres que tiene Potosí, otros 500 hombrespara resguardar la seguridad”, aseveró el policía.

En varias oportunidades, el ministro de Gobierno, Carlos Romero, informó que la policía no prepara ningún dispositivo extraordinario de seguridad para los festejos patrios, a tiempo de pedir a las organizaciones sociales que no exista respuesta a las provocaciones de los grupos contrarios al MAS.

David Tezanos, titular de la Defensoría del Pueblo, instó a la población a respetar el derecho a la protesta y pidió a las plataformas ciudadanas realizar sus manifestaciones en defensa del 21F en Potosí de forma pacífica, sin alterar el orden público.