Al menos cuatro legisladores del MAS desahuciaron la expulsión de seis de sus colegas, misma que fue decidida en el ampliado de este partido en la ciudad de Cochabamba, el fin de semana. Los parlamentarios calificaron como “apresuradas” estas decisiones y recordaron que existen instancias internas que no fueron tomadas en cuenta.

“La única instancia que puede determinar la suspensión definitiva de autoridades o militantes es el tribunal de honor del MAS o en su caso un fallo del Tribunal Electoral. Estas son las instancias que habilitan o deshabilitan a las autoridades electas, como es el caso de diputados y senadores”, explicó el diputado Juanito Angulo, uno de los acérrimos evistas dentro del parlamento.

El sábado, el ampliado departamental del MAS aprobó un documento de nueve puntos uno de los cuales dispone la expulsión inmediata de seis legisladores: Magali Lourdes Gómez Araníbar, Rosario Garcia Onofre, Olivia Guachalla Yupanqui, José Luis Flores Colquillo, Damián Laime Parada y María Lisbeth Vargas Flores, todos, diputados por Cochabamba.

“Primero somos de las organizaciones sociales, después de eso recién vino la sigla. No pueden manejar alegremente y decir los vamos a expulsar. Si van a expulsar, por ejemplo a mi persona, entonces tendrán que expulsar a todas las organizaciones sociales”, recordó la diputada Gloria Callisaya, quien desafió a sus correligionarios de Cochabamba que tuvieron a Evo Morales en la testera.

De ese modo, las decisiones de un ampliado departamental empezaron a ser cuestionadas por los propios masistas, quienes reclamaron un debido proceso en cualquier instancia, ya sea departamental o nacional y observaron la forma cómo se aprobaron esas expulsiones.

Al igual que Callisaya, la senadora paceña Virginia Velasco les recordó a los dirigentes cochabambinos que fueron las organizaciones sociales en ampliados las que designaron a sus representantes ante el partido político y estos solo cumplieron lo que mandó un ampliado sectorial, por tanto, deben ser las mismas organizaciones las que retiren su confianza en sus parlamentarios y no el partido, dijo.

El diputado opositor, Beto Astorga, dijo que esta decisión de expulsar y la resistencia que hay en el propio MAS desnuda la división que existe internamente y que ya alcanzó a la brigada de Cochabamba, donde debería haber una unidad en torno a Evo Morales, pero ya no es así cuando sus propios diputados critican sus decisiones.

En marzo de 2022, el Tribunal de Honor del MAS decidió la expulsión del diputado suplente Rolando Enriquez Cuéllar, reclamó su curúl al TSE y pidió separarlo de la bancada del MAS; hoy, el diputado 'expulsado' sigue en funciones y su caso está en manos del Tribunal Constitucional.