Gabriela Ramos /

El gobierno del presidente Luis Arce ratifica su militancia en el MAS-IPSP y desecha las versiones de desmarque. De esta manera negó esa y otras siete mentiras en su contra. Reiteró su compromiso con la construcción de un Estado Plurinacional digno, soberano, con crecimiento económico y justicia social.

Ayer el Movimiento Al Socialismo – Instrumento Político por la Soberanía de los Pueblos (MAS-IPSP) celebró 17 años desde que ganó las elecciones presidenciales por primera vez con el 53%. En ese marco, el Gobierno nacional emitió un mensaje en el que ratificó su pertenencia al Instrumento Político.

“Ratificamos que somos un gobierno del MAS-IPSP, electo por el pueblo boliviano en las urnas; ratificamos nuestros principios antiimperialistas, anticapitalistas, antineoliberales, anticoloniales y antipatriarcales, y ratificamos que seguiremos avanzando en el camino de nuestra Revolución Democrática y Cultural”, señala parte del documento.

 De esta manera el Gobierno respondió a las acusaciones en contra de las autoridades que lo conforman, de supuestamente haberle dado la espalda al partido azul. 

Además, el presidente Arce se pronunció en sus redes sociales en relación al Día de la Revolución Democrática y Cultural y destacó el triunfo electoral del 18 de diciembre de 2005, que posibilitó que Evo Morales sea el primer presidente indígena en la historia de Bolivia.

“Con nuestro Instrumento Político MAS – IPSP iniciamos una profunda transformación del Estado y un proceso de inclusión social, económica, política y cultural, orientada al Vivir Bien de todas y todos los bolivianos”, manifestó el Jefe de Estado en sus redes sociales.

Arce reiteró su compromiso y el del Gobierno nacional para seguir trabajando por la consolidación de un Estado Plurinacional digno y soberano, con crecimiento económico y justicia social

Ocho mentiras

En el comunicado emitido por el Gobierno nacional respecto al Día de la Revolución Democrática y Cultural, el Ejecutivo rechaza al menos ocho “acusaciones infundadas”, cuyo objetivo es desacreditar su lealtad con el MAS-IPSP.

Dichas mentiras son las siguientes: un presunto pacto de impunidad del Gobierno con la derecha a cambio de gobernabilidad; el uso de banderas rojas en lugar de las azules, que caracterizan los colores del MAS; el uso del registro de visitas en las entidades públicas para gestionar la personería jurídica para el Partido Socialista 1 (PS-1); protección oficial al delito del narcotráfico.

Autoridades del Ejecutivo también fueron acusadas de que trabajan con la DEA; de ejecutar un plan contra el presidente del MAS-IPSP, Evo Morales, para impedir que sea candidato en las próximas elecciones nacionales; una supuesta traición al Instrumento Político; la versión de que infiltrarían a personas en el acto que se celebró ayer en Sacaba, para perjudicar este encuentro.

El Gobierno advierte de que este tipo de acusaciones no hacen más que promover la división dentro de esta organización política.

“Nunca hay que temer a la existencia de tensiones internas en nuestro Instrumento Político, que son de conocimiento público”, señala el documento, donde también se plantea “que la mejor manera de resolver nuestras diferencias es hablando con franqueza revolucionaria y en espacios internos del MAS-IPSP”.

Por ello el Ejecutivo nacional llama a implementar medidas para profundizar la democracia interna en el partido, para fortalecerlo y anteponer las coincidencias para construir las condiciones necesarias para seguir avanzando con el Proceso de Cambio.