El alcalde suspendido de Quillacollo, Eduardo Mérida, vuelve a ir a Sucre ayer para pedir que el Tribunal Constitucional Plurinacional atienda el recurso de queja para que retome sus funciones.

En tanto, en Quillacollo, 26 trabajadores de Obras Públicas despedidos por el alcalde suplente Zacarías Jayta denunciaron una “masacre blanca” y piden estabilidad.

Esperan respuesta

Luego de su último viaje a Sucre, Mérida explicó que se encuentran a la espera del sorteo del magistrado que atenderá su caso.

“El secretario general del tribunal nos ha dicho que el recurso ya está en comisión y que se debe sortear qué magistrado se hará cargo del caso,  hemos pedido que no pueden mirar de palco y que de una vez decidan qué alcalde es el constitucional y válido para Quillacollo”, dijo el Alcalde el pasado 17 de julio.

Aseguró que la atención del caso se dilata porque el presidente del Concejo Municipal, Víctor Osinaga, quiere “inventar procesos penales, para aprehenderlo”. Hoy  nuevamente se dirigió a Sucre a la espera del sorteo de magistrados.

Protesta

Ayer, trabajadores del Sindicato de Obras Públicas de la Alcaldía de Quillacollo cumplieron un paro de 24 horas exigiendo la reincorporación de 26 personas que fueron despedidas de forma injustificada, informó el dirigente Mario Ramírez.

Entre los afectados, Ramírez señaló que hay madres, padres y trabajadores antiguos que están por jubilarse, además de un obrero que ganó un amparo en la gestión de Mérida.

Antes, el director de Recurso Humanos, Gerson Escalera, puntualizó que se despidió a 80 personas debido a  que “no cumplían sus funciones”.

Los retiros fueron ejecutados cuando el alcalde suplente de Quillacollo, Zacarías Jayta, inició su gestión.

Ramírez anunció que solicitaron audiencia con Jayta y, en caso de que ésta sea rechazada, radicalizarán sus medidas de presión para volver a sus fuentes de trabajo lo antes posible.

Entre los despedidos está un trabajador que ganó un amparo en la gestión de Eduardo Mérida.

80 RETIROS Y 125 CONTRATACIONES

Al iniciar la gestión del alcalde suplente de Quillacollo, Zacarías Jayta, se procedió al retiro de 80 personas que trabajaban mientras gobernaba el alcalde suspendido, Eduardo Mérida.

El jefe de Recursos Humanos, Gerson Escalera, explicó que se emitieron despidos debido a “que no cumplían sus funciones”

Luego, en 15 días se procedió a la evaluación de nuevos postulantes a los cargos desocupados y se contrató a 135 trabajadores.

Todas las nuevas contrataciones fueron bajo ítem. En el municipio existen más de 300 ítems y otros 400 contratos por consultorías.