“No son renovadores, son traidores”, así se refirió ayer el líder de los cocaleros del trópico de Cochabamba, Evo Morales, a los legisladores del Movimiento Al Socialismo (MAS) afines al presidente del Estado, Luis Arce, y que coparon las presidencias de las comisiones legislativas de la Cámara de Diputados dejando marginados a sus correligionarios del ala ‘evista’.
El pronunciamiento de Morales surge un día después de las declaraciones del vicepresidente del MAS, Gerardo García, quien habló de traición al interior del masismo y acusó a Arce y al vicepresidente David Choquehuanca de buscar una sigla diferente a la del partido azul para postular a las elecciones del 2025.
En el mensaje que compartió Morales en sus cuentas de redes sociales no hace alusión directa al Presidente o al Vicepresidente; sin embargo, habla de un alejamiento en el Movimiento Al Socialismo (MAS).
“Abandonaron las luchas históricas de nuestro pueblo y mártires de la Revolución Democrática Cultural que ofrendaron sus vidas por la Nacionalización de RRNN y la refundación de Bolivia. Traicionaron al MAS-IPSP, se sometieron a la derecha golpista”, escribió el exgobernante en su cuenta de Twitter.
Los disputas internas en el MAS se agudizaron después de que Jerges Mercado ganara la presidencia de la Cámara de Diputados en una sesión que fue cuestionada por el ala radical de esa organización política a la cabeza del diputado Héctor Arce.
Por su parte, la Dirección Nacional del MAS, volvió a arremeter contra una autoridad del gobierno de Arce; esta vez, apuntó al presidente del Servicio de Impuestos Nacionales, Mario Cazón, y reiteró la teoría de un “plan negro” para dañar la imagen del exmandatario.
A través de un comunicado firmado por dirigentes como García, la cúpula del partido oficialista afirma que Cazón ordenó involucrar al expresidente “en un caso de deuda impositiva de una empresa con tal de perjudicar su imagen”.
“Rechazamos que una autoridad encargada de investigar la evasión de impuestos en paraísos fiscales y sectores empresariales vinculados al golpismo, use el cargo para perseguir a nuestra dirigencia nacional y congraciarse con los operadores del Plan Negro”, señala el documento.
La dirigencia masista pide a Cazón dejar de “amedrentar y amenazar con la destitución a compañeras y compañeros que por ética y dignidad profesional se niegan a ser utilizados en esta guerra sucia”.
“El MAS-IPSP asumirá acciones contra este y otros casos de acoso político en esa y otras dependencias del Estado en contra de hermanas y hermanos a los que persiguen por ser ‘evistas’”, cierra el comunicado.
EL DESMENTIDO
Entre tanto, el presidente ejecutivo del Servicio de Impuestos Nacionales rechazó enfáticamente las afirmaciones de la dirigencia nacional del MAS e indicó que él es militante del partido.
“Como presidente de Impuestos Nacionales, como Mario Cazón, rechazo de forma enfática las aseveraciones que se vierten en dicho comunicado, puesto que mi autoridad viene cumpliendo las funciones en el marco de lo que establece el Código Tributario 2492 y también la Ley 2166 del SIN”, dijo Cazón en conferencia de prensa.
La dirigencia masista pidió a Cazón dejar de “amedrentar y amenazar con la destitución a compañeras y compañeros que por ética y dignidad profesional se niegan a ser utilizados en esta guerra sucia”, y advirtió con asumir acciones en su contra.
Cazón dijo que “la citada denuncia maliciosamente falta a la verdad”, por lo que exhortó a presentar las pruebas documentales “si existiesen”.
Asimismo, indicó abiertamente que es militante del MAS y que tiene “la conciencia limpia” ya que también trabajó en la institución cuando Morales era Jefe de Estado.