La Sala Plena del Tribunal Supremo Electoral (TSE) analizará este martes técnicamente los plazos necesarios para garantizar la redistribución de escaños y reconfiguración de circunscripciones en base a los resultados del Censo de Población y Vivienda 2024.

El vocal Francisco Vargas informó que, para ese propósito, el Órgano Electoral requerirá contar con datos oficiales de población del último Censo, porque la distribución de escaños de la Cámara de Diputados se hace en base al crecimiento poblacional de cada uno de los departamentos.

“Si un departamento crece demasiado, va recibir mayor cantidad de escaños y, por lo tanto, tendrá que reasignarse circunscripciones uninominales y para esto se necesita un tiempo prudente porque hay que hacer un trabajo de campo”, informó la autoridad.

Explicó que el Tribunal tiene una geografía electoral propia, así como los asientos y recintos electorales georreferenciados, y hará todo posible para garantizar que la nueva distribución de escaños y la delimitación de circunscripciones estén listas de manera previa a una convocatoria para el próximo electoral 2025.

Asimismo, Vargas precisó que el trabajo técnico tomará en cuenta la Constitución, porque estipula que la distribución de escaños no se hace simplemente por la cantidad de población, sino se asignan escaños por equidad a los departamentos con menor población y menor desarrollo económico.

En base a ello, el Tribunal Supremo Electoral hará un trabajo técnico y remitirá un proyecto de ley de distribución de escaños a la Asamblea Legislativa para que sea aprobada.

Vargas agregó que, en una segunda etapa, si correspondiera una asignación mayor de escaños a algunos departamentos y que se puedan restar a otros, entre esos departamentos se tendrá que realizar una nueva delimitación de algunas circunscripciones, si es que se asignaran circunscripciones uninominales al departamento que recibirá más escaños.

Manifestó que el Órgano Electoral asumirá una posición institucional para dar certeza sobre el cumplimiento y total apego a la Constitución, en sentido que la distribución de escaños será determinada por el Órgano Electoral en base a los datos del pasado Censo.