La ministra de la Presidencia, María Nela Prada, denunció que el gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, y el presidente del Comité pro Santa Cruz, Rómulo Calvo, tienen sus manos con sangre del pueblo y pidió a las instituciones llamadas por ley a actuar con celeridad para que se haga justicia.
Apoyada en imágenes y videos mostró diferentes casos de violencia y vulneración de derechos que se dieron durante el paro indefinido del Comité pro Santa Cruz por el censo 2023, los que fueron denunciados en el ámbito nacional e internacional; pero no hizo referencia a las consecuencias del cerco de organizaciones afines al MAS y el desbloqueo violento en algunas zonas.
La autoridad manifestó que se han asumido acciones contra varias personas por los hechos que se generaron durante los 20 días del paro indefinido en el departamento de Santa Cruz. “Estos hechos no deben, no pueden, repetirse nunca más”, manifestó.
“Pese a este régimen del terror que se pretende instalar desde la Gobernación de Santa Cruz, desde el gobernador (Luis Fernando Camacho), sus asesores y algunos miembros del Comité pro Santa Cruz, miembros del grupo grupo paramilitar de la Unión Juvenil Cruceñista, lamento mucho que no se dé a conocer”, manifestó.
Prada acusó a Camacho, al presidente cívico Rómulo Calvo y a otros grupos violentos de sembrar terror en ese departamento, en particular en las tardes y noches respecto a la radicalización de esta medida a la violencia y muertos "hoy estas personas son las responsables y tienen machadas sus manos con sangre del pueblo".
Asimismo, pidió a las instituciones llamadas por ley "celeridad" para hacer justicia y marcar un precedente respecto a estos hechos que no pueden volver a repetirse.
Hizo un recuento de los “resultados del paro” en Santa Cruz, dijo que esta protesta está dejando cuatro personas fallecidas, un caso de violación múltiple; varias mujeres “ultrajadas, agredidas, insultadas” y mujeres de pollera obligadas a que se quiten su vestido, 178 denuncias de heridos.
Asimismo, señaló que se registró un choque en San Ignacio de Velasco, violencia extrema en el municipio de La Guardia, en Buena Vista, así como la violencia que se generó en el octavo anillo tras un cabildo y el registro esta madrugada de un muerto y un herido.
Prada señaló que durante este tiempo se vulneró el derecho a la salud, el derecho a circular libremente, el derecho a la educación, el derecho de que los productores puedan trasladar y vender sus productos, pero en toda su conferencia apuntó que estas vulneraciones se dieron por el paro cívico cruceño.
La autoridad hizo una presentación, aunque no respondió preguntas de los periodistas, en su exposición denunció que “dictaduras cívicas y actitudes fascistas” se quieren imponer, así como un pensamiento único.
Manifestó que “otra Santa Cruz es posible, que realmente se sienta orgullosa del pluralismo”, lo que en su criterio actualmente sucede todo lo contrario.
“Este tipo de paros nunca más se debe generar en Santa Cruz”, sentenció Prada; al asegurar que la pulseta no se hizo al Gobierno, sino al pueblo cruceño trabajador que durante los 20 días de paro se ha visto perjudicado.
La autoridad mostró videos de diferentes situaciones de violencia, pero no mostró el cerco de las organizaciones aliadas del MAS a la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, tampoco mostró que un grupo de personas bloqueó el ingreso y salida de combustibles de la refinería de Palmasola.
Prada eludió referirse a los miles de toneladas de basura que se acumuló en la ciudad a causa del cerco, pese a tratarse de un problema de salud pública. Tampoco citó los casos en los que se desbloqueó de manera violenta los puntos donde se cumplía el paro cívico.
La ministra también señaló que producto del paro cívico se generó un daño económico de $us 36 millones y aproximadamente $us 720 millones en los 20 días de paralización.
