El informe de gestión del presidente Luis Arce Catacora, al cumplir dos años de gestión en el Gobierno, se caracterizó, como sucedió en los últimos años, por las cifras de millones que manejó el Mandatario y, en esta oportunidad, por lo pormenorizado que fue el mismo.

Es importante que el Presidente presente un informe completo y bien sustentado de su gestión, de lo que se hizo en el último año y de lo que se proyecta avanzar en el subsiguiente, pero sin entrar en detalles mínimos que pueden llegar a cansar a quienes escuchan el mensaje presidencial.

Hacer mención de datos demasiado pormenorizados no es tarea del primer mandatario, sino de un viceministro u otra autoridad, por lo que, en este caso, Arce Catacora debió centrar su atención en los temas macros y dedicar una parte de su informe para hablar sobre el Censo con el fin de transmitir certidumbre a la población.

Sobre el Censo, algunos analistas y exautoridades señalaron que el informe de gestión de Luis Arce efectivamente no debió incluir el tema del Censo, sin embargo, otros afirman que era pertinente que el Mandatario hiciera referencia a este aspecto por tratarse de un asunto delicado y que está presente en la agenda de los bolivianos.

El presidente del Comité Cívico de Santa Cruz, Rómulo Calvo, lamentó que el Presidente no se haya referido al Censo ni al paro que lleva Santa Cruz desde hace 19 días.

El expresidente Carlos Mesa calificó de demagógico el discurso de Luis Arce y señaló que no dio respuesta a las principales preocupaciones que tienen algunos sectores.

Mesa advirtió que Arce llevó a la democracia “a sus niveles más bajos” y calificó a esta gestión de “ineficiente, corrupta y violenta”.

La polarización en la que se debate el país se vio reflejada, una vez más, en los incidentes que se vivieron en el hemiciclo parlamentario, con algunos asambleístas que exigieron a voz en cuello Censo para 2023, mientras que otros, los oficialistas, con megáfono en mano trataban de hacer callar a los opositores.

Tras referirse a todos los avances que logró en dos años de Gobierno, el Mandatario remató asegurando que no permitirá que algunos grupos “desestabilizadores” sigan en ese camino, con el respaldo de las organizaciones sociales.

Pero más allá de los números que se puedan mencionar en un informe, la población espera que sus autoridades le brinden certidumbre, con acciones concretas para pacificar el país y que las alentadoras cifras de reactivación económica que se dan a conocer se vean reflejadas en los bolsillos de la familias.

La gente pide trabajo, salud, educación y comida, y que se deje de lado las disputas encarnizadas entre oficialistas y opositores que solo dañan al país.