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Medio: El Deber
Fecha de la publicación: lunes 26 de septiembre de 2022
Categoría: Autonomías
Subcategoría: Autonomía Indígena
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Este pueblo, en el norte de La Paz, no tiene una posta de salud y existen muertes que pueden ser evitadas. No hay conexión y para ser atendidos en un centro de salud deben viajar cuatro días en bote hasta el municipio de Sena, en Pando
El abandono es la herida que más duele a la nación indígena Araona. Una sola escuela que funciona está en condiciones precarias y no hay postas de salud en sus ocho comunidades. Sin acceso a servicios básicos y la conexión con el interior del país es casi nula y muy costosa si es que alguien se anima a salir. Son poco más de 70 familias araonas que piden atención del Estado para poder escapar de la pobreza y evitar que exista un etnocidio en uno de los 36 pueblos indígenas reconocidos por la Constitución Política del Estado.
El territorio indígena Araona se encuentra en el norte del departamento de La Paz. Es parte del municipio de Ixiamas, pero su escasa relación es con la región de Beni. Llegar a Puerto Araona, una de las comunidades de esta nación, significa recorrer un duro periplo. Hay que arribar primero a Riberalta, en Beni, y luego descender por el río Madre de Dios durante días hasta llegar al pueblo indígena. También se puede alquilar una avioneta, pero ese servicio es muy costoso.
Las casas fueron construidas por los mismos indígenas, todas con madera
El olvido pasó de ser una tristeza a ser un sentimiento normal. Los araonas no recuerdan cuándo tuvieron alguna atención del Estado. Siguen sin educación, siguen sin acceso a varios derechos, siguen sin salud, siguen sin servicios básicos, siguen olvidados. Los niños y niñas corren y juegan con lo que pueden en el intenso calor que puede llegar en verano hasta los 35 grados centígrados: ramas, juguetes de madera o una simple botella de plástico son instrumentos de juego.
Las personas mayores hacen lo posible para que sus familias sobrevivan. Ahora están en la culminación del cultivo de castaña y se vienen duros meses para vivir. Los araonas se dedican a la caza, pesca y producción agrícola para su consumo propio. Es muy difícil –casi imposible- que puedan sacar sus productos a Riberalta. Tiene mucho costo. Tienen un pequeño convenio con la Empresa Boliviana de Alimentos (EBA) compra 10.000 cajas de las más de 30.000 que produce esta nación indígena cada año.
La producción de castaña es el sustento de las familias, pero no tienen muchos mercados
Tierra indígena
La nación Araona tiene titulado como territorio indígena 95.000 hectáreas y de esa extensión el 60% son utilizados para producir castaña. En cada gestión tienen un promedio de 30.000 cajas de castaña de producción.
“Estamos olvidados por parte de las autoridades. Necesitamos que se construya una posta de salud y una nueva escuela, pero nada hacen. Actualmente los alcaldes, gobernadores que pasan no saben si existen los araonas. Estamos olvidados, abandonados y nuestros derechos de pueblos indígenas están vulnerados”, lamentó Chanito Matawa, dirigente araona y que ahora es asambleísta departamental de La Paz.
Matawa no oculta su pena por lo que sucedió hace poco. Un anciano –que en su cultura son considerados sabios las personas de la tercera edad- falleció porque no se pudo hacer nada con sus saberes ancestrales. Era urgente llevarlo a una posta de salud, pero la más cercana está a cuatro días en embarcación en esta época. Lo mismo sucede con los niños, mujeres y todos los pobladores. Se enferman y solo queda rezar para que se mejoren.
“El hermano ha fallecido por descuido, por falta de alimentación y nutrición. No se ha podido dar a tiempo vitaminas o alimentos. No tenemos buena alimentación y se está acabando lo poco que nos han dado en el municipio y la gobernación. No tenemos ni postas de salud cercanas, a la única que podemos acudir viajando durante cuatro días es al de Sena, donde hay un centro de salud”, explicó Matawa.
Por ahora, la nación Araona solo tiene un medio de comunicación con el exterior de su poblado. Son radios HF que fueron instaladas hace unos años por organizaciones no gubernamentales y que sirven para que los indígenas puedan comunicarse con Riberalta. Matawa detalló que en una ocasión estos equipos ayudaron para que un anciano pueda ser atendido a tiempo, ya que emitieron un llamado de auxilio a través del sistema de radios HF.
Población araona
De acuerdo con datos del Censo de 2012, el pueblo Araona cuenta con una población 910 personas. Según Matawa, ahora hay algo más de 70 familias. Los araonas son uno de los pueblos catalogados en estado de alta vulnerabilidad por su densidad poblacional y el casi nulo acceso a los servicios básicos, así como el de salud y educación. A ello se suma su ubicación geográfica entre los ríos Manupare y Manurimi, que hacen difícil su conexión con los centros poblados.
La pesca es una forma de subsistencia. Existen variedades de peces en los ríos amazónicos
En Bolivia se promulgó la Ley 450, cuyo objetivo fundamental es establecer la protección a pueblos indígenas en peligro de extinción. Luego de ocho años de su promulgación, esta norma no se implementa y se pone en riesgo la existencia física y cultural de las naciones como los Araona, Ese Ejja, Yaminawa, Machineri, Chacobo, Pacahuara, Ayoreo, Weenhayek, Tapiete y Uru, Además de los pueblos indígenas en aislamiento voluntario, no contactados o segmentos como Toromona, Araona, Ese Ejja, Ayoreo, Yuqui, Pacahuara, entre otros.
La defensora del pueblo interina, Nadia Cruz, detalló que en época de la pandemia se conminó a las diferentes autoridades para que atiendan los requerimientos de la nación Araona, entre ellas en el ámbito de salud. Además, la funcionaria recordó que este pueblo indígena tiene una alta vulnerabilidad por la desatención estatal en materia de salud, educación, conexión e identidad.
Cruz aclaró que estas peticiones se realizaron tanto en las gestiones de Evo Morales, de Jeanine Áñez y en la actual de Luis Arce.
El Ministerio de Salud inició en marzo un plan de atención en salud a favor de los pueblos indígenas, sobre todo a los que están alejados de los centros urbanos. Se informó que se conformaron brigadas compuestas por 1.274 profesionales, entre ellos 353 médicos. Además, el ministro de Salud, Jeyson Auza, detalló que en este plan intervienen 20 instituciones del Estado.
Según el Pometsekatapó de la Nación Araona, Palex Washima Jewapi, -quien es líder de este pueblo indígena que antes era llamado Capitán Grande-, hasta la fecha el plan anunciado por el Gobierno no llegó a las comunidades araonas. Es más, la autoridad indígena lamentó que en otros pueblos exista prioridades para instalar postas de salud y no así en la nación Araona.
“El que tiene salud se salva. Si hay algún accidente uno no se puede salvar. Nos sentimos abandonas. Más fácil para nosotros es decir que no se acuerdan de nosotros. Es una pena. Lo ideal sería construir una posta de salud y que haya un médico, eso sería lo ideal”, afirmó Washima.
En la comunidad Las Chacras el paisaje es único. El verde de los árboles rodea las pocas casas de madera que hay en el lugar. El calor es infernal, pero cuando hace frío -según dicen los comunarios- la temperatura desciende bruscamente. Es en la época de invierno cuando los niños sufren por las enfermedades respiratorias. Se curan con plantas medicinales y tratamientos propios. En la nación Araona pocos conocen los medicamentos tradicionales.
Washima quiere un futuro mejor para su pueblo. Lo mismo que Matawa y todas las familias que habitan el Territorio Indígena Originario de la Nación Araona (TIONA). Quieren salir del abandono y dejar de ser olvidados. Buscan sacar sus productos a los mercados, pero necesitan mucha ayuda.
Los ríos son el medio de comunicación más utilizado