Medio: Los Tiempos
Fecha de la publicación: miércoles 06 de julio de 2022
Categoría: Órganos del poder público
Subcategoría: Órgano Ejecutivo
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En las dos últimas semanas, las noticias sobre narcotráfico se han sucedido una tras otra y han ingresado a la agenda pública y mediática, al extremo de que cada vez no sólo son más frecuentes sino también más estremecedoras por su grado inusitado de violencia.
Entre el ajusticiamiento de dos policías y un voluntario en Porongo y el triple asesinato en Ivirgarzama hay un factor común: la mano del narcotráfico.
Pero ambos hechos tienen también como denominador común la saña con que han sido ejecutados, tan propia de los cárteles de la droga; recordemos que los dos sargentos y el voluntario fueron acribillados cuando estaban arrodillados y de espaldas; en el caso de Ivirgarzama, dos de los tres jóvenes cruceños murieron baleados, mientras que el tercero fue degollado. Estos hechos suelen darse en la frontera del norte de México con Estados Unidos, donde operan peligrosos cárteles de la droga, y también en Colombia o Perú, en organizaciones mafiosas vinculadas al tráfico de estupefacientes. Que en el caso de Porongo el principal implicado, Misael Nallar, sea yerno de un narcotraficante extraditado a Brasil, Einar Lima Lobo, y que en la casa del sospechoso del horrendo crimen de Ivirgarzama se haya encontrado droga nos lleva a concluir que las ilícitas actividades del narcotráfico en el país salen poco a poco, con fuerza, a la superficie.
En el caso Porongo, también llama la atención la conexión estrecha entre Nallar y dos efectivos de la fuerza policial antidroga, los oficiales Julio Muñoz y Rubén Aparicio, a quienes pidió ayuda para encubrir los tres asesinatos; hoy, ambos están suspendidos y serán remitidos a la justicia; Muñoz inclusive fue condecorado por el Ministro de Gobierno por haber aprehendido a Nallar, aunque todo indica que el yerno de Lima Lobo en realidad se entregó.
Otro caso vinculado al narcotráfico es la denuncia del diputado Rolando Cuéllar contra el vicepresidente del MAS, Gerardo García, por haber recibido financiamiento de un narcotraficante argentino para las campañas de ese partido. El presidente Luis Arce ha instruido una investigación sobre esas serias sindicaciones de legislador oficialista.
Es lamentable que nuevamente irrumpa el narcotráfico en el debate público. Los seis asesinatos a sangre fría en las dos últimas semanas revelan que estas actividades ilegales están a la orden del día y que inclusive han penetrado en la Policía y, específicamente, en la fuerza policial antidroga llamada a impedir estos serios delitos. Simultáneamente, la denuncia del diputado oficialista Rolando Cuéllar también pone al descubierto que las narcomafias presuntamente han aportado fondos para financiar al partido en función de gobierno, por lo cual es necesario que se investigue a fondo estas sindicaciones. Estos hechos, ¿muestran que operan cárteles transnacionales de las drogas en el país?
No se puede permitir que el narcotráfico corrompa al Estado y a la sociedad. Si no se reacciona a tiempo y se tolera esta actividad ilícita, se corre el riesgo de caer en una espiral de violencia tal que no habrá punto de retorno posible.