Alcaldes, dirigentes campesinos y asambleístas del MAS de la zona de los valles cruceños, cerraron con cadenas y candados, las instalaciones del Centro de Educación Ambiental (CEA) y otras oficinas de la Gobernación para exigir un diálogo “directo” con Luis Fernando Camacho sobre sus pedidos de regalías y obras de infraestructura.

La medida de presión comenzó cerca de la medianoche del martes y ayer por la mañana un grupo de bomberos forestales rompió las cadenas para permitir el ingreso de funcionarios departamentales y normalizar la atención al público en medio de las quejas de los movilizados que se declararon discriminados por la acción. 

A pesar de la tensión, la Policía no llegó. Tras esa protesta, Luciano Alegre, secretario general de la central campesina de la provincia Caballero, anunció que las bases de su organización “decidirán una nueva etapa de protestas, incluida la toma de instituciones de la Gobernación o eventualmente bloqueos”. Esas decisiones, explicó, se anunciarán este miércoles.

El dirigente señaló que ellos acudieron al CEA porque fueron citados para conversar con Camacho. Desde la Gobernación precisaron que la coordinación fue para instalar una mesa técnica para analizar las demandas del sector que exige la construcción de puentes, la reparación de vías y la redistribución de las regalías.

El asambleísta Hugo Valverde (MAS) amenazó con una protesta masiva en Santa Cruz de la Sierra “para medir fuerzas” con las bases del gobernador Camacho “y sus grupos de choque”. “La provincia Caballero, entre los municipios de Comarapa y Saipina, supera los 30.000 habitantes. No es lo mismo venir en bollo, hemos venido un grupo de dirigentes con la misión de dialogar. ¿Quieren fuerza? Tenemos fuerza y nos vamos a medir”, alertó el asambleísta.

El secretario de Desarrollo Productivo, Fernando Menacho, explicó a EL DEBER que “tuvieron que habilitar los accesos” porque al interior del CEA están los bomberos forestales y hay animales silvestres rescatados. “No se puede cerrar unas instalaciones que son de todos los cruceños. Eso no está bien. Ahora, todos tienen la misma línea de venir a incomodar la gestión de la Gobernación, incomodar a nuestro gobernador”.

Menacho lamentó que el único pedido con el que llegan sea ese; hablar solo con el Gobernador. “El gobernador está en provincia. Ellos mandan sus cartas exigiendo y amenazando; esa no es la forma de actuar. Ellos son afines al Gobierno y al MAS”, subrayó.

Durante la última semana de mayo y los primeros días de junio los municipios de San Julián y Cuatro Cañadas bloquearon la ruta a Beni para exigir la construcción de caminos y el pago de regalías, una agenda parecida a la de los valles. Además, los dirigentes de esos municipios también exigieron hablar con Camacho para poder iniciar las negociaciones.

Alegre descartó que esta nueva movilización que comenzará en los valles sea política. “No nos ven como cruceños. ¿Cuál será su capricho de Camacho de no atendernos?, dijo el dirigente campesino. La protesta cuenta con el respaldo de la Asociación de Municipios de Santa Cruz (Amdecruz).

El Gobernador Luis Fernando Camacho estuvo ayer en San Julián, hasta donde viajó para entregar insumos médicos y hablar del censo.