• Redacción Central /

La Confederación Nacional de Mujeres Campesinas Indígenas Originarias de Bolivia “Bartolina Sisa” ratificó ayer el liderazgo Evo Morales Ayma en el Movimiento Al Socialismo-Instrumento Político por la Soberanía de los Pueblos (MAS-IPSP).

En conferencia de prensa, la ejecutiva de esa organización de mujeres, Flora Aguilar, explicó que la decisión fue asumida después de una profunda reflexión del Estatuto Orgánico de esa fuerza política, de la Ley Electoral y del reglamento interno de la confederación en la que se reconoce a Evo Morales como “Comandante de la Revolución Democrática Cultural”.

Señaló que el ampliado de emergencia concluyó en seis puntos, en los que se condena que cualquier militante que sea electo o designado anteponga sus intereses personales a la unidad del MAS-IPSP, por lo que se recomienda a las autoridades a nivel nacional, departamental y regional buscar espacios de diálogo interno, respetar y cumplir la estructura orgánica y política del Instrumento Político más grande del país.

Así como respaldar las decisiones debidamente fundamentadas que asume el Tribunal de Ética del MAS y demanda su cumplimiento en todas las instancias del nivel del Estado. También exigen respeto a los líderes fundadores consecuentes con el proceso revolucionario que forjaron; rechazan todo intento de denigración e insultos porque gracias a su lucha se concretó la Revolución Democrática Cultural y el Proceso de Cambio con profundos resultados estructurales.

“Ratificamos al hermano Evo Morales como líder y Comandante del proceso de la Revolución Democrática y Cultural. Desde la organización de mujeres más grande de la historia de Bolivia damos nuestro respaldo y junto a nuestro líder nato nacional e internacional construimos nuestra historia con inclusión, respeto y sobre todo con dignidad”, sostuvo.

Finalmente, Flora Aguilar  advirtió que la Confederación Nacional de Mujeres Campesinas Indígenas Originarias de Bolivia se constituye en guardiana de la unidad y respeto a los líderes del MAS-IPSP, así como la defensa de esa fuerza política de todo intento de división interna y externa.