A poco más de un  año de haber sufrido una fractura que le llevó a perder la Alcaldía de El Alto y  en medio de expulsiones internas y crecientes denuncias de prorroguismo de la cúpula  dirigencial,  el MAS, o al menos algunos de sus dirigentes y militantes, culpan a la derecha y a los medios de comunicación (cuándo no) de las fisuras que agrietan a ese partido.

El Ministerio de la Presidencia, en un comunicado, asegura que la derecha ha “reforzado las tácticas no convencionales, utilizando todo el poderío de la guerra multidimensional, a la espera de lograr la implosión de las fuerzas internas de nuestro Proceso de Cambio” y dice que hay una agenda mediática para posicionar la división del partido oficialista.

Olvida que las denuncias contra la dirigencia masista fueron lanzadas por militantes de ese partido, que ellos hablaron de dictadura interna, que fue el jefe nacional quien denunció que hay viceministros que lo quieren perjudicar, que los mismos funcionarios del gobierno del MAS son quienes denuncian atropellos de los dirigentes y que la rebelión contra “dedazo” les hizo perder El Alto.