Por otra parte, analistas, opositores y activistas cuestionaron las últimas expresiones en los Yungas de La Paz de los mandatarios del país, Evo Morales y Álvaro García Linera, sobre la expulsión a “chutazos” de los que demandan el respeto al 21F y la presunta pelea entre “q’aras e indios”, al sostener que buscan coartar la libertad de expresión y generar violencia en el pueblo boliviano.

La agenda del Presidente en los Yungas incluyó entrega de obras el martes 10 en Coripata, el miércoles 11 en Caranavi, el jueves 12 en La Asunta y ayer en Irupana, donde entregó unidades educativas, plantas de producción de miel y otras infraestructuras.

El jueves, seis productores de coca fueron detenidos cuando se dirigían a La Asunta con carteles pidiendo que el Gobierno pare la erradicación en la zona. El dirigente Miguel Narváez lamentó la situación y denunció que acusaron falsamente a los productores de llevar dinamitas con el objetivo de causar caos en La Asunta. El ministro de Gobierno, Carlos Romero, aseguró que estas detenciones no tuvieron nada que ver con la presencia del presidente Evo Morales.

Otro grupo de cocaleros bloqueó una ruta de La Asunta para evitar presuntamente la presencia del mandatario en la zona. Un equipo de periodistas del canal estatal Bolivia TV quedó parado en la zona y se denunció que fueron tomados como rehenes. Sin embargo, los productores aseguraron que sólo quedaron bloqueados en la carretera.

Dirigentes de la zona, en contacto con Radio FMBolivia, contaron que la presencia de productores en los actos del Presidente fue mínima y que sólo participaron “carpeteros”, aquellos cocaleros que tienen licencia de comercialización emitida por el Gobierno. “Las bases no asistieron a los actos. Es falso que los Yungas apoya al MAS. El MAS ya no tiene presencia aquí”, dijo un dirigente.

Al respecto, el estudioso Yerko Illijic dijo que los discursos de los mandatarios muestran el “obscurantismo” y “discurso del odio” en que está entrando el MAS, el declive de este partido desde las elecciones subnacionales de 2015, la pérdida de imagen de sus dos principales figuras ante la sociedad, entre otros.

“Están orientados a exacerbar las diferencias raciales de grupos que tienen cierto poder político o que en esos grupos existe todavía una reserva electoral importante”, sostuvo.

En tanto, los asambleístas Gonzalo Barrientos y Amílcar Barral (UD) aseguran que la intención de Morales y García Linera es confrontar a los bolivianos entre los que defienden el 21F y los que siguen el masismo, además de coartar la libertad de expresión.

6 cocaleros detenidos presuntamente por llevar carteles contra el presidente Evo Morales en el acto de La Asunta, el jueves pasado.

EVO: "ACTIVISTAS DEL 21F SON PAGADOS"

El presidente Evo Morales aseveró ayer en Irupana que en las ciudades del país cada día se paga a las personas que lucen las poleras del 21F.

“¿Saben qué están haciendo? En las ciudades pagan para que algunos se vistan con la polerita del 21 de febrero, pagan diariamente, esa es la prebenda”, dijo.

Por otro lado, la diputada del MAS, Concepción Ortiz, aseguró que el ministro de Desarrollo, César Cocarico, miente al presidente Evo Morales sobre el conflicto en los Yungas, donde algunos sectores se distanciaron del partido de Gobierno.

"Esto es con votos, no con “chutazos”. Y en votos los bolivianos ya le ganaron con claridad. Usted aquí no va a patear a nadie, así que guarde su fanfarronería". Samuel Doria Medina. Líder de UN